Refrescante heterodoxia: la búsqueda de Mazda de vehículos sostenibles y divertidos
Grandes momentos de un rebelde de la automoción, desde el motor rotativo de hidrógeno al Skyactiv-X. Todo el mundo sabe que Mazda hace coches que cautivan a los conductores. Y, aunque pueda parecer que eso está reñido con la necesidad actual de una movilidad más sostenible, lo cierto es que Mazda ha trabajado desde sus comienzos en el desarrollo de vehículos cada vez más limpios y eficientes. Ahora bien, nunca a costa de sacrificar el placer de conducción. Debido a esa actitud, Mazda ha tenido que derrochar imaginación a lo largo de las décadas. Como resultado —y más allá de su afición a los motores inusuales—, la marca ha explorado innumerables maneras de mejorar la eficiencia de sus coches. Este proceso ha dado lugar a algunos productos muy característicos, como el primer turismo que fabricó Mazda. El Mazda R360 supuso el banderazo de salida a la “estrategia del gramo” de la marca que, todavía hoy, se esfuerza por eliminar todo el peso no esencial en los vehículos. Ese afán explica algunos elementos del R360, como …




